Un taxista de Pliego ha conseguido que los jueces le den la razón en su lucha por conseguir que la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia retirara la orden que le impedía sustituir su vehículo de siete plazas por otro de la misma capacidad y que le imponía que el nuevo debía tener solo seis plazas.

La sentencia de la Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Región de Murcia que da la razón al taxista señala que éste contó en su reivindicación con el apoyo del ayuntamiento de la localidad y de organizaciones vecinales, que corroboraron la necesidad de seguir contando con las siete plazas de siempre.

Así, estos testigos expusieron que esa capacidad era la aconsejable, ya que la mayor parte de los servicios que prestaba el taxista eran colectivos, para trasladar a pacientes al mismo centro hospitalario, entre otros lugares, además de exponer que es el único taxi que existe en esta población murciana.

Por otra parte, el presidente de la Unión Democrática de Profesionales del Autotaxis y Turismos de Servicio Público expuso que el sector no se vería afectado con el mantenimiento de las siete plazas, no constituyendo esto una competencia para el sector del transporte en autobús.

La Sala, al estimar el recurso presentado por el taxista, ha acordado anular la orden de la dirección general de Transportes de la Comunidad Autónoma de Murcia de marzo de 2011, que le impedía sustituir el coche por otro de la misma capacidad.

Además, ha condenado a la demandada a pagar las costas, al haber prosperado la demanda entablada contra la misma.

La administración regional expuso al oponerse a la estimación del recurso que con su decisión trataba de evitar un caso de competencia desleal.