El torneado de madera, la cerámica y el esparto, todos ellos oficios artesanos que valoran el trabajo hecho con las manos y se resisten a desaparecer, han sido los protagonistas de una nueva edición del mercadillo ‘El Mesoncico’, que ha tenido en el vino de la tierra y la degustación del típico ‘rin-rán’ el complemento gastronómico en una fría jornada de invierno. Las demostraciones de estos oficios ancestrales, tan vinculados a la historia de Cehegín, han atraído la atención de mayores y pequeños, quienes han observado el proceso artesanal de creación de objetos de barro, esparto o madera desde las materias primas naturales hasta el resultado final. Muchos visitantes han aprovechado la ocasión para adquirir alguno de estos productos.
La plaza del Castillo, uno de los enclaves urbanos más bellos de Cehegín con monumentos como la iglesia de Santa María Magdalena, el palacio de los Fajardo o el antiguo Ayuntamiento, se ha engalanado con banderas y reposteros y se ha llenado con los más de 50 puestos de artesanos procedentes de toda la Comarca del Noroeste y otros puntos de la Región de Murcia que han ofrecido embutidos, pan casero, dulces típicos, artículos de regalo o decoración.
El mercadillo ha coincidido con la primera jornada de la V Ruta de la Tapa y del Cóctel y la próxima edición se celebrará en cuarto domingo del mes de abril, puesto que en el mes de marzo no tendrá lugar por coincidir con el Domingo de Ramos.