La Concejalía de Seguridad Ciudadana que dirige María Dolores Carrasco informa que debido a algunas situaciones que se han producido en la localidad en los últimos días es conveniente que se tengan en cuenta algunos consejos generales sobre todo para las personas mayores que son más propensas a sufrir accidentes o ser víctimas de delitos y que por ello las personas que les rodean deben prestarle una especial atención:
-No abran la puerta de su casa a desconocidos, instaladores de gas, de electricidad, mendigos, vendedores, etc. Generalmente, los estafadores se hacen pasar por estas personas, y se aprovechan de los ancianos que viven solos.
-No guarde mucho dinero en su casa, y el que tenga, que esté en un lugar seguro, que no sea fácil encontrarlo. La misma consideración hay que tener con las joyas, que habitualmente se dejan en los cajones del dormitorio, de fácil acceso.
– Procure no hablar con extraños. La soledad les lleva, en muchas ocasiones, a conversar con desconocidos, haciéndoles determinadas confesiones sobre su forma de vida, que interesan mucho a quienes van a aprovecharse de un indefenso, así como la sustracción de objetos personales en ese momento.
– No revele sus datos personales. Nadie tiene que saber cuál es su situación económica y si vive solo o acompañado.
– No lleve consigo mucho dinero. Procure no ir solo a cobrar. La cartera llévela en un bolsillo interior, y el bolso, siempre cerrado, colgado del hombro, en bandolera, con el asa cruzada en el pecho.
– Tenga cuidado con las llamadas telefónicas de desconocidos. No dé ninguna información de sus datos personales, ni familiares.
– Desconfíe de ofertas que parecen demasiado buenas para ser ciertas. Normalmente, son estafas.
– Ante cualquier incidencia de este tipo, llame al teléfono de emergencias 112, o a sus familiares próximos, para que denuncien estos hechos, siendo de gran ayuda para la Policía en su trabajo contra estos delitos.
Hay que insistir en que, los familiares al cuidado de las personas mayores, han de poner en práctica estas medidas, e inculcarlas de la mejor manera a los ancianos, para garantizar la seguridad de estas personas que, por su edad y condiciones físicas y mentales, son personas desvalidas e indefensas, objetivo de delincuentes.