La Consejería de Presidencia inicia los trabajos de recuperación en 525 hectáreas afectadas por el incendio de Salmerón
La Comunidad y el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente emprenden los trabajos de forma conjunta
La Consejería de Presidencia, a través de la Dirección General de Medio Ambiente, junto al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, ha iniciado los trabajos de recuperación en 525 hectáreas de la zona afectada por el incendio declarado hace un año en Moratalla, que afectó a un perímetro de 42,31 kilómetros y a una superficie total de 1.370,10 hectáreas de terreno forestal y agrícola del paraje Sierras y Vega Alta del Río Segura, y ríos Alhárabe y Moratalla, catalogado como Lugar de Importancia Comunitaria.
El proyecto de regeneración del área afectada se realizará por fases e irá encaminado a recuperar las condiciones previas al incendio y ayudar a la regeneración de la zona. La restauración de la zona incendiada contará con una inversión total del Gobierno central y del Ejecutivo regional de 1.478.845 euros, de los cuales el Ministerio aportará 728.000 euros y la Consejería de Presidencia, 750.383 euros.
Por tanto, se trata de mejorar el ecosistema afectado para poder así aumentar la biodiversidad y las condiciones de vida para la fauna, aumentar la cobertura forestal, reducir la erosión, fomentar la protección frente a futuros incendios y recuperar la economía local.
Tras una valoración inicial de los daños, se han establecido una serie de acciones prioritarias encaminadas a favorecer la regeneración natural del bosque, así como a evitar la proliferación de plagas forestales.
En una primera fase, las actuaciones de emergencia se están centrando en la corta, retirada y triturado de la madera para evitar el daño al regenerado natural, y la conservación de los suelos para prevenir la escorrentía, erosión y desertificación de la zona.
Los trabajos, que llevan en marcha desde principios de abril, consisten fundamentalmente en la corta de arbolado muerto por acción del fuego, el triturado de ramas y arbolado fino, la construcción de albarradas de madera y de mampostería para retener los arrastres de sedimentos cuando se produce una lluvia de cierta intensidad, y la reparación de vías forestales. Al finalizar los trabajos de restauración ecológica propiamente dichos, se prevé reparar aquellos tramos de caminos de servicio de los montes que hayan resultado dañados por los desprendimientos de rocas, el arrastre de sedimentos por las lluvias torrenciales y el tránsito de maquinaria.
Su objetivo es la conservación del medio ambiente, procurando minimizar en todo momento las interferencias con la reproducción de la fauna local. Los tratamientos selvícolas han hecho posible la aparición de gran cantidad de hierba, lo que ha favorecido el aumento de poblaciones de especies presa, como conejo y perdiz, y esto ha propiciado una recolonización del territorio por parte de diversas especies de aves rapaces.
Dada la gran extensión de la zona a tratar y la urgencia de las actuaciones, los trabajos no se detendrán en la época estival, previéndose su finalización para final de 2013.
Próximos trabajos en la zona
Una vez concluidas las actuaciones de emergencia, se emprenderán otras acciones con el fin de restaurar la zona quemada mediante la realización de trabajos de diversa índole, según el estado en que se encuentre cada área.
La climatología del presente año, marcada por la presencia de importantes lluvias, y las óptimas condiciones de la masa de pinar incendiada, han propiciado que la regeneración sea la adecuada en muchas áreas y, por tanto, no será necesario tener que recurrir a la repoblación artificial.
En una segunda fase de regeneración a medio plazo, se estudiaran y abordarán posibles trabajos, tales como la repoblación forestal en aquellas zonas con escasez de regeneración, los tratamientos selvícolas en zonas donde el regenerado sea excesivo y la reparación de infraestructuras.